Una mesa auxiliar es una parte muy importante de tu salón. Puede ayudarte a mantener todas tus cosas organizadas y a asegurarte de que no tienes que ir demasiado lejos para coger algo. Una buena mesa auxiliar debe ser de fácil acceso y tener un aspecto agradable en la habitación, pero en realidad eso no es todo. Aunque algunas personas te dirán que todas las mesas son iguales, ¡no lo son! Dependiendo de lo grande que sea tu sofá, de lo alto o bajo que seas, de dónde te sientes en relación con la pantalla de la televisión (u otro punto focal), etc., hay ciertos parámetros que conforman una mesa auxiliar ideal. En este post los repasaremos todos para que puedas elegir la perfecta para ti.
Debes asegurarte de que tu mesa auxiliar guarde las mismas proporciones que tu sofá.
- Si eliges una mesa para acompañar a tu sofá, es importante que te asegures de que tienen las mismas proporciones. Deberá elegir una mesa que coincida con la altura de los reposabrazos del sofá para que pueda utilizarse como reposapiés cuando sea necesario.
- También querrás asegurarte de que ambas piezas tengan más o menos la misma anchura y longitud. Así te aseguras de que nadie se caiga accidentalmente sobre ella, ni se enganche la pierna en alguna esquina o saliente incómodo de la pieza (lo que podría causar lesiones).
Una mesa auxiliar debe tener una altura similar a la de los reposabrazos de su sofá.
Las mesas auxiliares deben tener la misma altura que los reposabrazos del sofá, o al menos 5 cm más. Si la mesa auxiliar es demasiado corta, tendrás que agacharte para alcanzarla, lo que puede provocarte dolor de espalda o lesiones nerviosas en brazos y manos.
Si una mesa auxiliar es demasiado alta para usted, puede bloquear la visión de otras personas cuando esté sentado en un sofá. Esto dificultará la conversación, lo que no es bueno si quieres hablar de algo importante.
Cuando coloques objetos en tus mesas auxiliares, debes asegurarte de que se pueden alcanzar desde donde te sientas.
Cuando coloque los objetos en sus mesas auxiliares, asegúrese de que se pueden alcanzar desde el lugar donde se sienta. Si tiene que mover su silla cada vez que quiere sacar algo de la mesa o volver a colocarlo en ella, es posible que tenga una mesa auxiliar corta o alta. Una mesa auxiliar corta puede requerir un taburete adicional para alcanzar lo que se coloca encima; una más alta permitirá que las personas de la misma altura que usted y las que son más altas que usted alcancen los objetos sin tener que mover las sillas.
También es importante que haya suficiente espacio entre las sillas y las mesas para que todos puedan verse durante las conversaciones, tanto si están enfrente como al lado.
La anchura de la mesa auxiliar debe estar en proporción con la anchura de su sofá.
Al comprar una mesa auxiliar para su sofá, es importante tener en cuenta que la anchura de la mesa debe ser proporcional a la anchura de su sofá. La razón es que si compras una mesa auxiliar demasiado ancha para tu sofá, entonces no encajará bien con tu sofá y parecerá incómoda. Si compras una mesa auxiliar demasiado estrecha para tu sofá, no habrá suficiente espacio a ambos lados cuando la gente se siente en su sofá, ¡y podrían golpear sus piernas contra ella cuando se sienten o se levanten!
¿Qué significa «proporcional»? Significa que si la anchura de la mano extendida de una persona abarca tres pulgadas de ancho mientras está sentada en un sillón (que normalmente tiene brazos de unos 20″ de profundidad), entonces su mesa auxiliar no debería exceder de 4″ de ancho en su punto más amplio (eso es más o menos como dos dedos de ancho). Sin embargo, si es posible, intenta que sea más estrecha para que haya suficiente espacio a ambos lados entre el lugar en el que se sienta la persona y el lugar en el que se extienden sus rodillas al ponerse de pie de nuevo ….
Tu mesa auxiliar debe lograr el equilibrio adecuado entre ser ligera y pesada para evitar que se vuelque.
La mesa auxiliar debe tener un equilibrio adecuado entre peso y ligereza. Si es demasiado ligera, puede volcarse con el viento o al chocar accidentalmente con ella; por el contrario, si la mesa es demasiado pesada, no podrá moverla en absoluto.
Para encontrar este equilibrio entre peso y robustez, mide los reposabrazos de tu sofá cuando estén bajados; esto te dará una idea de lo alta (o corta) que debe ser tu mesa auxiliar. A continuación, mide la anchura de tu sofá, así como su profundidad de adelante hacia atrás, y compara estas medidas con las de las posibles mesas auxiliares que te llamen la atención en Internet o en una tienda cercana, para que coincidan perfectamente con sus dimensiones.
Una buena mesa auxiliar es aquella que se adapta a las demás dimensiones de la habitación y no resulta molesta ni peligrosa.
A la hora de elegir el tamaño adecuado para su mesa auxiliar, tiene varias opciones. El primer paso es decidir si quieres o no un mueble de segunda planta. Si es así, es hora de hacer algunas cuentas:
- Mide la altura de tu sofá y añade 1 pulgada por cada 3 pies de distancia entre él y la pared (si la hay) contra la que estará tu mesa auxiliar.
- Multiplique ese número por dos si piensa utilizar esta mesa como mesa auxiliar; multiplique por tres si desea construir un espacio de almacenamiento debajo o utilizar la superficie superior como un área de visualización (esto puede ayudar a evitar el desorden).
Conclusión
Una mesa auxiliar debe encajar con las demás dimensiones de su habitación y no ser molesta o peligrosa. En general, debe buscar una mesa auxiliar que tenga proporciones similares a las de su sofá o sus sillas (altura, anchura y longitud). También debes asegurarte de que sea lo suficientemente robusta para que no se vuelque cuando se coloquen objetos sobre ella. Por último, ten en cuenta dónde pondrán las manos las personas que se sienten en la mesa cuando necesiten algo de su superficie